La fundación “La Caixa” impulsa un proyecto con participación de centros CPAN en la convocatoria CaixaResearch de Investigación en Salud 2023

La Fundación ”La Caixa” celebró el pasado 23 de noviembre un acto de entrega de ayudas a 33 proyectos de investigación en biomedicina y salud que se llevarán a cabo en centros de investigación, hospitales y universidades de España y Portugal. Se trata de proyectos seleccionados en el marco de la convocatoria CaixaResearch de Investigación en Salud 2023, que tiene el objetivo de impulsar la investigación biomédica de excelencia con gran impacto social en investigación básica, clínica y traslacional.

La convocatoria, a la que este año se han presentado 493 propuestas, está especialmente dirigida al abordaje de retos de salud, como las enfermedades infecciosas, las neurociencias, las enfermedades cardiovasculares y metabólicas relacionadas y la oncología, así como tecnologías que faciliten la labor en alguno de estos campos.

Dentro de este último bloque de proyectos relacionados con desarrollos tecnológicos, se encuentra el proyecto “Desarrollo de sensores que permitan controlar las dosis aplicadas durante la radioterapia FLASH”, uno de los beneficiaros en esta convocatoria de ayudas. Esta propuesta ha sido presentada por un consorcio coordinado por Consuelo Guardiola del Instituto de Microelectrónica de Barcelona (IMB-CNM, CSIC) y formado por investigadores del Centro Nacional de Aceleradores, la Universidad de Santiago de Compostela y del Instituto Curie de París. La iniciativa ha obtenido una financiación total de 971.936 euros.

Sobre el proyecto “Desarrollo de sensores que permitan controlar las dosis aplicadas durante la radioterapia FLASH”

El cáncer es uno de los problemas de salud pública más importantes del mundo. Se estima que el 20 % de la población desarrollará un tumor a lo largo de su vida. Alrededor del 50 % de los pacientes reciben radioterapia al menos una vez durante su tratamiento, lo que contribuye a un 40 % de las curaciones. Una radioterapia precisa implica focalizar en el tumor dosis lo bastante elevadas como para destruirlo a la vez que se evita dañar los órganos sanos circundantes. Esto supone un reto en el área de la física médica, ya que no se pueden dar dosis excesivamente altas, que podrían producir efectos secundarios en los tejidos sanos contiguos al tumor.

En los últimos años, una innovadora terapia llamada FLASH ha abierto la posibilidad de superar este escollo: con esta nueva modalidad de tratamiento se pueden administrar dosis mucho más elevadas a una velocidad ultrarrápida. Esto permite aumentar la cantidad de radiación que recibe el tumor, a la vez que se reduce la toxicidad en los tejidos sanos. Sin embargo, la implementación clínica de esta innovadora técnica requiere sensores capaces de cuantificar las dosis en estas condiciones de radiación extrema. Por ese motivo, en el presente proyecto se desarrollará un instrumento capaz de monitorizar las dosis aplicadas en la terapia FLASH, lo cual posibilitará optimizar su impacto en los pacientes.