ATLAS y CMS presentan sus resultados de 2015

Las partículas circularon por el Gran Colisionador de Hadrones (LHC) el domingo por última vez en 2015. Dos días después, los dos grandes experimentos de propósito general, ATLAS y CMS, presentaron sus resultados del Run 2, basados en el análisis de colisiones entre protones a la energía nunca antes alcanzada de 13 TeV, por los 8 TeV alcanzados durante el Run 1 de 2010 a 2012.

La cantidad de datos en la que se basan los análisis es todavía limitada, unas ocho veces menor que la conseguida durante el Run 1. Se necesitan grandes cantidades de datos para detectar nuevos fenómenos físicos. A pesar de esto, se han producido numerosos resultados: cada uno de los experimentos presentó alrededor de 30 análisis, la mitad de los cuales se referían a búsquedas de física más allá del Modelo Estándar, la teoría que describe las partículas elementales y sus interacciones. Este modelo tiene cuestiones abiertas, por lo que encontrar señales más allá de este modelo podría ayudar a resolverlas.

Los nuevos resultados de ATLASCMS no muestran ningún exceso significativo que pudiera indica la presencia de partículas propuestas por otros modelos alternativos como supersimetría, pero ambos experimentos han establecido nuevos límites para las masas de estas hipotéticas nuevas partículas. Los avances en física de partículas vienen a menudo de hacer retroceder estos límites. Por ejemplo, CMS y ATLAS han establecido nuevas restricciones a la masa del gluino, una partícula predicha por la teoría de la supersimetría.

Los dos experimentos también han observado un ligero exceso en el canal de desintegración en dos fotones. Los científicos calculan la masa de las partículas hipotéticas que se desintegran para formar un par de fotones, y observan cómo se repiten diferentes masas en los sucesos del LHC. Si esta distribución no corresponde con lo que se espera en procesos conocidos, es decir, aparece un 'exceso' (bump) en una masa específica que no se corresponde con ninguna partícula conocida, podría indicar que se ha producido una nueva partícula (y desintegrado produciendo dos fotones).

Sin embargo, este exceso es muy pequeño en este momento para extraer conclusiones. Hay que esperar más datos en 2016 para averiguar si este exceso es una fluctuación estadística sin consecuencias o la señal de la existencia de un nuevo fenómeno.