LHCb detecta indicios de anomalías en una premisa del Modelo Estándar

La colaboración del detector LHCb, en el colisionador LHC del CERN, publica indicios de discrepancias en las tasas de desintegración de los mesones B a muones y tauones (ambas partículas emparentadas con el electrón). De confirmarse el resultado, se pondría en entredicho una de las premisas del Modelo Estándar, la universalidad leptónica, que establece que electrones, muones y tauones se comportan exactamente igual en las interacciones electrodébiles, una vez se tiene en cuenta su diferencia de masa.
La colaboración del experimento LHCb, donde participan científicos de las universidades de Santiago de Compostela (USC), Barcelona (UB), Ramón Llull (URL) y del Instituto de Física Corpuscular (IFIC, CSIC-UV), publicó en junio en el repositorio digital arXiv las primeras evidencias de discrepancias entre las tasas de desintegración de mesones B, partículas compuestas por un quark b, en leptones diferentes, muones y tauones. Los leptones son partículas elementales como el electrón, el muón y el tauón, que se diferencian entre sí solo por su masa.
Según este análisis, publicado hoy en Physical Review Letters, los mesones B se desintegrarían en las colisiones del LHC de forma más frecuente en partículas tau que en muones. Sin embargo, el Modelo Estándar, la teoría que mejor describe las partículas elementales y sus interacciones, establece que en esta desintegración deben producirse idéntico número de ambas partículas teniendo en cuenta sus diferencias de masa, siguiendo el principio de universalidad leptónica.
De momento, el análisis solo arroja una probabilidad de 2 sigma de que el resultado no sea una fluctuación estadística, por lo que se necesitan más datos para alcanzar los 5 sigma que los científicos tienen como umbral para asegurarse de estar ante un auténtico descubrimiento de un nuevo fenómeno físico. Sin embargo, los resultados han atraído la atención de porque siguen el patrón de discrepancia medido con datos parecidos en otros experimentos similares como BaBar (del laboratorio SLAC, en Estados Unidos) o Belle (en KEK, Japón).