Se trata de un radioisótopo sintético que no se encuentra de forma natural en la Tierra y que se crea mediante reacciones nucleares. El estudio, realizado en con la técnica de espectrometría de masas con aceleradores (AMS) del Centro Nacional de Aceleradores (CNA), supone la primera publicación de datos de la presencia de este elemento en el Mediterráneo, concretamente en el mar de Liguria, y ha encontrado concentraciones 2,5 superiores a otras zonas.