
El experimento del Gran Colisionador de Hadrones (LHC) ha encontrado anomalías interesantes en la forma en que los mesones B0 se desintegran en leptones. La señal tiene aún una significación estadística limitada, pero refuerza indicaciones similares de estudios anteriores. De confirmarse, serían un signo de nueva física no predicha por el Modelo Estándar de física de partículas.